Empieza el mundillo de la tecnología a digerir los anuncios cataclísmicos de la semana pasada concernientes a la adquisición de Motorola Mobility por parte de Google y la salida de Hewlett-Packard (HP) del mercado de movilidad y sistemas personales.

Por un lado al serenarse los ánimos, los diferentes análisis en torno a la adquisición de Motorola empiezan a ser más claros y se ven mejor las intenciones de Google de utilizar las patentes de Motorola como una defensa ante sus competidores y su experiencia en el área de telefonía móvil y comunicaciones en general como un laboratorio de investigación y desarrollo, siendo la parte de manufactura y distribución una entidad prescindible, como anota el NY Times. Este diario  inclusive habla de una crisis de identidad para esta compañía. También ha dejado a verse a Microsoft como un posible ganador de fabricantes licenciatarios de Android que se pueden sentir traicionados por Google.

En el mundo del cómputo personal, se sigue analizando la salida de HP de este mercado y se empiezan a buscar posibles compradores de esta unidad de negocio y la verdad el panorama se ve muy complicado, ya que al final de cuentas se está vendiendo un negocio en decrecimiento. Se especula que inclusive ante la falta de un precio adecuado HP pudiera elegir mantener el negocio, pero salir del mercado de consumo masivo.

Inclusive el conocido comentarista John Dvorak especula sobre la posible adquisición de la unidad de negocios de cómputo personal de HP por parte de Microsoft, en un evidente tono de burla. Sin embargo al final de su nota, Dvorak es muy enfático acerca de que Microsoft necesita hacerse presente en la industria, ya que cada día pierde posicionamiento frente a los consumidores.

Algunas reflexiones:

En ambos eventos de la semana pasada, Microsoft resulta un claro perdedor. Su táctica de retrasar el crecimiento de Android vía demandas legales por violación de patentes ha perdido efectividad y tiene la imperiosa necesidad de acelerar el desarrollo de Windows Mobile 8. De hecho el desarrollo que está haciendo en conjunto con Nokia, tiene muy poco margen de error, ya que si el producto es poco menos que revolucionario va a ser ignorado por los consumidores que hoy en día están fascinados con sus iPhones y sus teléfonos inteligentes Android. La verdad no es el mejor ambiente para lanzar un nuevo producto.

En el terreno del cómputo personal la volatilidad afecta a Microsoft, ya que si bien es cierto que su principal vaca lechera (Office) va a continuar siendo rentable por un largo período y que al final de cuentas ellos cobran por cada Windows embarcado, independientemente del fabricante del equipo que lo incluye, este es un mercado en franco decrecimiento y es inevitable que van a empezar a embarcar menos copias cada año. Están urgidos de encontrar un nuevo producto estrella (a Kinect no le alcanzan las unidades embarcadas).

Igualmente el mensaje que envía la posible salida de HP de este mercado, no puede otra cosa que hacer dudar a los consumidores, tanto a los corporativos como a los domésticos, sobre la necesidad de seguir utilizando dispositivos con el ecosistema Windows. Para muchos casos las tablets son suficientes y el universo de aplicaciones disponibles es muy atractivo y sobre todo los precios muy bajos. Por ejemplo, aunque este blog se edita en una MacBook Pro con una copia legal de Office for Mac instalada, el programa Word no se utiliza para nada en su elaboración. La nota del día se va construyendo con una aplicación (BlogPress) con un costo menor a los 4 dólares en una Ipad y al final se termina con la herramienta gratuita de Blogger en la Web. Los días de los aplicativos costosos (una licencia de Office puede costar 600 dólares) se están terminando.

El modelo de negocio de Microsoft de colocar sus sistemas operativos en muchos dispositivos y después controlar las principales aplicaciones está seriamente amenazado y necesitan encontrar un modelo que lo pueda reemplazar en breve, en especial cuando en el terreno de la movilidad tienen los momios en contra. Tampoco hay que olvidar que Microsoft está buscando su identidad en línea ya sea con su buscador Bing o en sus alianzas con Facebook.

Microsoft me parece un malabarista con 3 pelotas al mismo tiempo y en realidad no tiene el lujo de dejar caer alguna.