Terminó el Consumer Electronics Show 2012 y la realidad empieza a golpear a los miembros de la industria. El resultado de la exposición en realidad se puede resumir como en mucho ruido y pocas nueces. No se mostró ningún avance tecnológico interesante y mucho menos se introdujo el gran producto que saque a los consumidores del sueño en que están desde hace un par de años, tanto por falta de dinero como por falta de productos atractivos.

Chris O'brien del San Jose Mercury News (SJMN) hace un análisis de la penetración de gadgets en el entorno doméstico (nota: define gadget como cualquier objeto con un microprocesador) y muestra que el crecimiento exponencial de los últimos años se ha detenido. Según las cifras de O'brien en 1975 existía un promedio de 1.3 gadgets por hogar y en 2008 se alcanzó un total de 24. 

Pero esta cifra se tiende a reducir dado que muchos consumidores están buscando reducir el número de dispositivos sin perder funcionalidad y como muestra basta un botón, ya que hoy en día un teléfono inteligente absorbe las funciones de un e-reader, de un reproductor de música, de un reloj e inclusive de una computadora. Simplemente la vida se va a hacer más difícil para los vendedores verticales y los grandes jugadores como Samsung o Sony, tienen la oportunidad de convertirse en los jugadores dominantes.

Otro punto importante es la posibilidad de convivencia entre los diferentes dispositivos de un hogar, de una forma sencilla y multi marca.  Y pongamos un ejemplo sencillo que hoy en día se puede hacer con muchos trabajo y limitaciones: estoy curioseando en mi Ipad en la página de Netflix y veo una película que me interesa, decido empezar a verla en la computadora, pero después de 5 minutos decido que una película con tanta calidad merece ser apreciada en mi televisión de 60 pulgadas. Me gustaría de la forma más sencilla simplemente encender la televisión y continuar viendo mi película con las menores interrupciones. Con el estado actual de la tecnología el mejor caso es dejar de ver la película en la computadora, tener conectado un Apple TV o una consola de juegos a la televisión y reanudar desde ahí la proyección, con algunos minutos de interrupción. La Ipad puede controlar al Apple TV por obvias razones, sin embargo no controla a la televisión y mucho menos a la consola de juegos. Todo esto asume por supuesto la existencia de una red doméstica con el suficiente ancho de banda. Instalar un ambiente de este tipo no es exactamente magia negra pero tampoco es algo sencillo, todavía está en el área de los aficionados conocedores y hobbystas.  

Después de revisar las diferentes notas emanadas del CES no he encontrado a ningún fabricante haciendo una propuesta de este tipo, si bien hay algunos "inteligentes" que buscan crear un "lock in" con el consumidor, como es la iniciativa de Microsoft de "la sala de estar inteligente".  Pensando como consumidor creo que las peticiones que tenemos para la industria son:

En mi opinión los consumidores y la industria vamos en términos divergentes, lo cual es una mala práctica de negocio. No se puede esperar una alta demanda de nuevos dispositivos en los próximos 18 meses, más allá de la nueva Ipad 3. Pero realmente no se puede esperar otra cosa de un industria con una oferta aburrida en un ambiente económico de vacas raquíticas.

Y también como parte de la resaca y fuera de los reflectores, Microsoft mandó un mensaje a los inversionistas que se deben esperar un par de semestres de ventas sin crecimiento. Durante la euforia de CES la consultora Gartner publicó las cifras de ventas de cómputo personal durante el año 2011 y su proyección para 2012 y el pronóstico es de decrecimiento moderado y una demanda débil. Las ultrabooks solo han emocionado a Intel y Windows 8 no tiene las condiciones para ser un detonador del entusiasmo y la demanda.

Bueno lo que pasa en las Vegas se queda en las Vegas y ya regresamos a la realidad.