Esta semana la creciente competencia que existe entre las 4 grandes compañías, Amazon, Apple, Facebook y Google, tomó un giro inusitado cuando la disputa se trasladó al mundo físico. Google y Amazon fueron el sujeto de rumores acerca de la apertura de tiendas físicas, lo cual a primera vista parece ir en contra de la intuición. Y para darle más sabor al caldo, empezó a circular la noticia sobre la entrada de Google al mercado de electrónica de consumo, mediante el lanzamiento de un dispositivo para entretenimiento casero, que afirman no es una televisión.

Por el momento, y hasta nuevo aviso, el mundo físico es el imperio de Apple. Prácticamente el mundo se divide en dos tipos de personas: quienes tienen al menos un dispositivo Apple y los que quisieran tener al menos uno. Y ni hablar del éxito que han sido sus tiendas, que son calificadas como una revolución del concepto de ventas al detalle. La tienda en la Quinta Avenida en Nueva York, genera más ventas por metro cuadrado que cualquiera de sus vecinos y en realidad han servido como un gran escaparate para sus productos. 

Aunque los rumores sobre Amazon y Google parecen disparatados (pensé en titular esta nota como "niños Page y Bezos ya dejen de fumar de eso"), en realidad son pasos necesarios para poder competir por el control de Internet, algunas notas y reflexiones:

En toda esta discusión por el momento hay un gran ausente: Facebook, quienes están más preocupados por la tibia recepción que ha tenido sus prospecto de oferta pública inicial. Sin embargo no hay que olvidar que uno de los grandes riesgos que ve Facebook para su futuro, es que precisamente no controla las plataformas de entrada a Internet y de hecho tiene dependencia a la navegación de Internet "tradicional"en una computadora personal, ya que también les "duele" la movilidad. Alguna vez se rumoró un "teléfono inteligente Facebook", pero el asunto no despegó. Cuentan las leyendas urbanas que el proyecto murió cuando se buscó el apoyo de las compañías telefónicas, cuyos grandes directores recibieron a carcajadas la propuesta de Mark Zuckerberg de repartición de ingresos.