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lunes, 3 de marzo de 2014

Sí el contenido es el rey, ¿por qué tratamos mal a los creadores?

Vacuus Finium se extiende a Twitter, para comentarios espontáneos durante el día, me pueden encontrar en @vacuusfinium.

Viñeta 1 Los famosos también lloran

Arturo Pérez-Reverte es uno de los más exitosos escritores contemporáneos en lengua española, y lo mismo ha escrito novela histórica, que novelas con temas más contemporáneos como la cultura del narcotráfico en México o las andanzas de los grafiteros urbanos. Después de haber sido corresponsal de guerra para diferentes medios, Don Arturo gracias a la aceptación de su obra, vive ahora una vida desahogada en Madrid y tiene un barco que le permite viajar por el Mediterráneo.

También escribe una columna que es ampliamente reproducida por diferentes medios en el mundo, y justamente aprovechó una de sus entregas más recientes para dar su opinión sobre el impacto económico que están teniendo los medios de distribución digital en los autores.  Verdaderamente la historia es muy conocida, pero no está de más mencionar los principales detalles:

  1. Consumir contenido sin pagar al autor es simplemente inaceptable.
  2. Aún con las mejores intenciones, para un autor es menos rentable la regalía que recibe por un libro electrónico que por uno impreso. Esto afecta a toda la cadena de valor.
  3. Sin un estímulo económico adecuado, simplemente no hay incentivo para los creadores.

Por cierto, Don Arturo, en el remoto y muy eventual caso de que usted pueda leer estas líneas, le puedo garantizar que si así lo desea, en su siguiente visita a México, una opípara cena corre por cuenta de Vacuus Finium. Por supuesto bañada, o ahogada, por el vino de su elección. No voy a racionar el alcohol con un veterano corresponsal de guerra y un escritor genial.

Viñeta 2 El verdadero salario del miedo

El pago por la reproducción de una pieza musical a través de un servicio de streaming (Spotify, Pandora) es de aproximadamente 0.23 centavos de dólar por cada ejecución. Este ingreso se divide a partes iguales entre el intérprete y el dueño de los derechos de autor. Con esta tarifa, un intérprete que sea dueño de su composición, necesita casi medio millón de reproducciones para conseguir un ingreso equivalente a mil dólares. (Dato tomado de la edición de Marzo de 2014 de la Revista Wired )
  1. ¿Qué mecanismo se utilizó para fija estar tarifa?
  2. ¿En serio creen los responsables de las plataformas de streaming que su futuro es viable sin revisar la remuneración de los artistas? Esta liga incluye un ejemplo de los ingresos de una artista de éxito medio.
Viñeta 3 ¿La banda en el cielo siempre toca la misma canción?

Estuve la semana pasada en el área de la Bahía, al norte de California y afortunadamente mi agenda se pudo acomodar, de tal forma que tenía disponible una tarde para estar en la tienda de discos Amoeba Music de San Francisco, sin prisas ni sofocones. Pude realizar algunas observaciones interesantes:
  • El inventario en novedades está realmente disminuido, ya no tienen todos los nuevos lanzamientos y de los pocos títulos elegidos, tienen pocas copias. Llevaba una lista de aproximadamente 20 títulos de mi interés, y encontré menos de la mitad.
  • Sin embargo, para el observador casual, la tienda está llena de inventario. Amoeba Music, vende discos previamente usados, y a través de este mecanismo puede ofrecer un acervo más interesante. Al final del día mi bolsa contenía 40 elementos, pero es muy notoria la ausencia de muchos títulos.
  • Hasta el fondo de la tienda, hay un pequeño mostrador dedicado a ediciones para audiófilos y ediciones japonesas en facsímil de las portadas originales. Todo lo que contiene este mostrador es muy caro, y es muy fácil caer en las extravagancias.
  • Dediqué un buen rato a revisar este mostrador, pero como que algo no funcionaba. Los muy elevados precios obligan a pensar muy bien que se elige, y de pronto caí en cuenta de que me detenía en llenar mi canasta de compra. Para efectos prácticos tenía prácticamente ediciones convencionales de la gran mayoría de los títulos ofertados. De haber elegido alguna pieza de ese mostrador, simplemente estaría comprando lo mismo que ya compré en otra ocasión. Estaría escuchando algo que ya escuché y conozco, pagando precios verdaderamente elevados, todo esto no es un paquete  que considere atractivo.
  • En una observación no metódica, creo que en el mostrador de ediciones especiales no había nada grabado después de 1995.

Acto Principal ¿Amar la música otra vez? ¿Cuándo dejamos de hacerlo?

La popular revista de tecnología Wired dedica su edición del mes de marzo de 2014 al estado de la distribución digital de contenido musical, y dedica un título que me parece algo contradictorio: "Amar la música, otra vez". ¿Qué nos reporta Wired en esta ocasión?
  • Considera que el principal problema para el escucha es la dificultad de navegar en medio de una abundancia musical, y encontrar música nueva.
  • Sin embargo, en su opinión la tecnología tiene soluciones a este problema:
  1. El nacimiento de los curadores, como los nuevos artistas. Es decir las personas que tienen tiempo y algún talento especial para navegar en la amplia oferta musical disponible y comparten sus hallazgos a través de blogs, podcasts y canales en YouTube.
  2. Algoritmos de recomendación, que utilizan técnicas de análisis y correlación, para supuestamente "predecir" que le puede gustar a un individuo.
  • Le dedican muy poco espacio a tocar el modelo económico y asumen, no se gracias a que sustancia mágica, que simplemente el gran almacen va a estar lleno de música permanentemente.
  • Como es de esperarse, no dedican una línea a la reproducción musical de alta fidelidad.

Algunas reflexiones:
  • Siento escalofrío nada más de pensar en vivir a merced de una máquina de recomendación de selecciones musicales. ¿Dónde queda el azar? ¿Dónde queda la casualidad? ¿Dónde queda la serendipia?
  • No he encontrado ningún dato que muestre cual es la composición de los acervos musicales de los diferentes servicios de streaming que existen. Pero tengo la certeza, que en su mayoría son catálogos muy bien anclados en el pasado, explotando el ayer.  Aunque no dudo que existan componentes contemporáneos, me atrevo a decir que más allá de las "cuarentas principales", debe haber muy poco de nuevo. ¿Quién se toma la molestia de trabajar por la quinta parte de un centavo de dólar? ¿Alguien me puede contradecir?

¿Como la promesa del jardín de la abundancia digital, se convirtió en un yermo en el que los compositores no componen, los músicos no tocan y los escritores no escriben? Solo para los registros: sigo amando la música y la literatura.

Epílogo No hay indicios para el optimismo

Aprovechando mi visita a San Francisco tuve la oportunidad de visitar la espléndida sede de la San Francisco Jazz Society (SF Jazz), para disfrutar un concierto del cuarteto del pianista noruego Tord Gustavsen. En algo que parece un cuento de hadas, los amantes del jazz en el área de San Francisco y Silicon Valley, se organizaron para crear una organización que promueva esta música y justamente están estrenando un edificio nuevo de más de 60 millones de dólares, que tiene espacio para conciertos y eventos educativos. Realmente es una organización admirable, con actividades prácticamente todo el año. Un par de observaciones tristes:
  1. El promedio de edad de los asistentes al concierto de Gustavsen es superior a los sesenta años. Tenía mucho tiempo de no ser de los más jóvenes en un evento. 
  2. Por su edad, el pianista podría ser hijo de la mayoría de los asistentes.
  3. En sus excelentes instalaciones,  de acuerdo al programa de la temporada de invierno, SF Jazz atendió a un total de 80,000 personas durante 2013.

Postdata I Los Sonidos de Vacuus Finium

La recomendación de hoy es la grabación de "Live SFJazz Center 2013", del grupo SF Jazz Collective.  Justamente la San Francisco Jazz Society, como parte de sus actividades mantiene un grupo formal, que se dedica a dar conciertos a lo largo del año. Sobra decir que este grupo está formado por algunos de los músicos más reconocidos de la escena actual.

Estos músicos reciben una residencia pagada, que les permite mantener algunos proyectos personales adicionales. Sin embargo esta agrupación es una verdadera máquina de hacer música, y tradicionalmente cada año se dedican a explorar la obra de alguna leyenda del jazz y presentar composiciones inéditas de sus miembros. La recomendación de hoy está dedicada al pianista Chick Corea.

Una vez que se puede ignorar la crítica común de que el jazz nacido en los arrabales de Nueva Orleans ha terminado en los inmaculados salones de los millonarios de la Costa Oesta, la oferta musical del SF Jazz Collective es irresistible. Sus discos son de edición limitada de cinco mil piezas, pero se pueden conseguir en iTunes, sin límite hasta dónde se.


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