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sábado, 28 de junio de 2014

De jueces despistados, aplicaciones infernales y los radicales de siempre

Vacuus Finium se extiende a Twitter, para comentarios espontáneos durante el día, me pueden seguir en @vacuusfinium.

Preludio: Una situación aburrida, pero muy legal

En el muy eventual y remoto caso que quisiera tener una señal de televisión abierta en alguna de las televisiones que hay en los WWHQ de Vacuus Finium, nada sería más simple que ir a comprar una antena y colocarla en el techo. Si por cuestiones estéticas dicha antena se colocara en casa de mi vecino no se violaría ninguna ley. Tampoco se violaría ninguna ley si dicha antena se colocara a una distancia mayor con un cable largo. Tampoco sería extraordinario si se supiera que le estoy pagando una renta a estos vecinos por utilizar los techos de sus casas. Nadie diría nada si pagara también una renta por la antena en lugar de adquirirla de contado.

Primer Acto: ¿Jueces despistados o nada más amigos de los poderes fácticos?

En alguna ocasión ya había platicado de un servicio muy ingenioso de televisión por Internet proporcionado por la compañía Aereo. Simplemente permiten que sus suscriptores vean canales de televisión abierta por medio de Internet, en sus teléfonos inteligentes, tablets o computadoras personales. Consiguen esto a través de una tecnología muy avanzada que permite colocar un gran número de micro-antenas en arreglos de muy alta densidad y después retransmitir esta señal por Internet hacia cada suscriptor, por supuesto a cambio de una módica renta mensual. 

A simple vista, no parece haber nada ilegal, ya que se trata de señales disponibles en el espectro radioeléctrico de manera natural, ¿no es cierto? Lamentablemente en realidad las principales compañías norteamericanas de televisión abierta consideraron que Aereo violaba sus derechos de propiedad intelectual y en consecuencia demandaron con una energía digna de mejores causas. ¿Qué buscaban tan nobles y honorables organizaciones con su demanda? Simplemente detener los servicios de Aereo de manera inmediata.

Dado que detrás de Aereo están algunos veteranos de los medios de comunicación, el pleito legal fue de dimensiones épicas. Finalmente las partes en conflicto tuvieron que dirimir sus diferencias en la Suprema Corte de Justicia de los Estados Unidos y evidentemente el veredicto va a tener profundo impacto en la industria tecnológica y en los medios masivos de comunicación.

Esta semana se dio a conocer el veredicto final de esta instancia de administración de justicia y fue en contra de Aero, en una decisión dividida y esta compañía suspendió sus operaciones el día de hoy. La pérdida para los inversionistas se estima en cien millones de dólares.

Los favorecidos por la decisión cantan a los cuatro vientos que simplemente se protegieron los derechos eternos y galácticos de las nobles compañías de televisión. Los no favorecidos hablan de un marco legal anacrónico que va a detener la innovación. En mi opinión, la razón está con estos últimos. Algunos comentarios y reflexiones:

  • Como antecedente y para entender bien los verdaderos motivos detrás de esta decisión hay que aclarar que de acuerdo a la legislación vigente en los Estados Unidos, las señales de televisión abierta no son tan públicas como se piensa, ya que si los prestadores de servicios de televisión restringida desean ofrecer en sus paquetes la retransmisión de la señales disponibles libremente en el espectro, tienen que pagar a los que originaron este contenido.
  • Nada más como comentario, en los países avanzados, las señales de televisión pública, son justamente eso y su retransmisión a través de sistemas de televisión restringida no implica ningún pago de regalías. ¿Qué parte de pública, no  entendieron?
  • Pero justamente esta legislación es la que soporta la decisión de la Suprema Corte, y de acuerdo a su veredicto Aero es un sistema de televisión restringida y por lo tanto si quiere operar tiene que pagar por los canales públicos.
  • Como comentario, la Suprema Corte de Justicia es un club de sexagenarios, al menos, que no utilizan ninguna de las tecnologías digitales, al menos de forma institucional. Ni siquiera el correo electrónico. Esto implica que un grupo, que considera al Viagra como tecnología avanzada, está tomando las decisiones por las nuevas generaciones.
  • Para apreciar cual es el alcance que tienen las decisiones de este club de ancianos, hay que referirse a una situación similar, en la que las innovaciones en la tecnología electrónica pusieron a temblar a las compañías de televisión.
  • En la década de los setentas, cuando aparecieron las primeras videograbadoras domésticas, las compañías de televisión abierta pusieron el grito en el cielo. Había aparecido un dispositivo inspirado por el maligno que estaba robando su propiedad intelectual y si se permitía su proliferación simplemente las nobles compañías de televisión estaban condenadas a la desaparición. ¿No es curioso que en casi cuatro décadas no hayan renovado sus argumentos?
  • En esa ocasión también el asunto llegó a la Suprema Corte de Justicia de los Estados Unidos, que en esa ocasión fallaron a favor de las videograbadoras domésticas e introdujeron el concepto de "uso justo" por parte del público común y corriente. ¿Qué pasó después?  Los creadores de contenidos para televisión encontraron nuevas fuentes de ingresos, y nuevas formas de relacionarse con su público.
  • ¿Se imaginan si el fallo hubiera sido en contra de las videograbadoras? 
  • Detrás de este fallo en realidad están los intereses del complejo industrial de la televisión restringida, quienes viven con miedo de la implosión de su modelo de negocio, que obliga a que los clientes tengan que comprar hasta lo que no desean. Obviamente odian cualquier alternativa para sus clientes.
  • En lo personal el fallo me tomó por sorpresa, ya que me parece que Aero es una gran solución, con una gran tecnología detrás, y simplemente están tomando señales que de cualquier forma son públicas.
  • Creo que más allá de una total desconexión de sus Señorías con la vida digital, la decisión de la Suprema Corte es una reacción del más rancio status quo empresarial, que está algo fastidiado de algunas innovaciones tecnológicas que están transformando demasiadas industrias, algunas muy añejas. Ganaron esta batalla, pero no la guerra, y se los aseguro.

Segundo Acto Sin embargo, hay algunas innovaciones que van demasiado lejos

La aplicación Monkey Parking nace con el noble propósito de reducir el tiempo de espera por un lugar de estacionamiento en las calles de San Francisco, todo por un precio por supuesto. ¿Cómo funciona? De una manera simple, un usuario de Monkey Parking, que tiene su auto aparcado y está apunto de dejar su espacio, por medio de la aplicación avisa aquellos en busca de ese espacio en dónde va a estar uno disponible.  Aquellos interesados participan en una mini-subasta, y aquel dispuesto a pagar más, se lleva su lugar.

La aplicación está disponible en Roma, ciudad de residencia de los creadores, y en San Francisco California. Y justamente en esta ciudad las autoridades ya enviaron una notificación indicando que esta aplicación viola los ordenamientos legales vigentes. Los creadores, cómodamente separados por muchos kilómetros, ignoran la advertencia y dicen que ellos simplemente están en el negocio de vender información, la ubicación de un espacio que va a estar disponible y avisan que van a continuar sus operaciones.

La existencia de esta aplicación ha sido mal recibida en San Francisco y es como una ofensa más de la comunidad tecnológica a la ciudad y como era de esperarse, los políticamente inmaculados que pululan por esos pagos, ya pusieron el grito en el cielo. La malvada comunidad tecnológica no solo es responsable del aumento del precio de las rentas de las viviendas y el desplazamiento de los residentes de la ciudad menos afluentes, sino que ahora conspiran para acaparar el poco espacio de estacionamiento disponible en la ciudad. 

En lo personal creo que la aplicación es una forma ingeniosa de resolver un problema real, pero dado que estamos hablando de un espacio público me parece que el operador debe ser el gobierno de la ciudad, o al menos recibir una parte de los ingresos. Más que litigar el gobierno de la ciudad de San Francisco debe preocuparse por crear las leyes que les permita ser los únicos operadores de soluciones de este tipo, al tiempo que negocian con los creadores de Monkey Parking la compra de su desarrollo.

Acto Final  Y hablando de los radicales que protestan

Esta semana que termina, se llevó a cabo en la ciudad de San Francisco la reunión anual que hace Google para los desarrolladores de aplicaciones para Android y se hicieron varios anuncios muy importantes, que espero comentar pronto. Pero aquellos residentes en San Francisco que odian todo aquello asociado a Google, no podían desaprovechar la oportunidad de protestar una vez más en contra de su bête noire.

Dado que la reunión se llevó a cabo en el Moscone Center en el corazón de la ciudad, no podían tomarlo más que como una provocación y reaccionaron en consecuencia. Se estableció un piquete de huelga afuera del edificio de convenciones, con algunos de los participantes disfrazados como personajes de la saga Star Wars y un par de sesiones fueron interrumpidas a grito pelado por activistas que acusaban a Google de los desalojos de algunos residentes y de ser una empresa totalitaria. Esta liga contiene un generoso portafolio fotográfico de las protestas.

No más de 20 personas participaron en estas protestas, pero no podía faltar Erin McElroy, activista ya presentada en estas páginas. Me imagino que el resto estaba muy preocupado buscando lugar para aparcar sus vehículos.

Postdata I Los secretos en el clóset de los políticamente inmaculados

En el universo de organizaciones políticamente inmaculadas, no hay alguna que sea tan políticamente inmaculada como Greenpeace, al menos en las apariencias. Sin embargo tan noble y desinteresada organización ha estado en los titulares de prensa y no necesariamente en circunstancias que les gustan:
  • La falta de pericia de sus trabajadores unida a la falta de controles internos en su operación ocasionó una pérdida de casi 4 millones de euros por malos cálculos asociados al manejo de las transferencias de divisas a sus diferentes oficinas de representación. Ayudaría que trataran de entender a ese capitalismo que tanto odian.
  • Pascal Husting, alto directivo de la organización, vive en Luxemburgo aunque su oficina está en la ciudad de Amsterdam, con una separación de 400 Km. ¿Cuál es la forma de transportación entre ambos sitios, elegida por un paladín del medio ambiente? Un viaje en avión, que es la manera más cómoda y expedita, por supuesto. Lamentablemente, este medio de transportación es el que tiene un huella de carbón más grande. Una vez que su desliz ha quedado al descubierto, Hasting ha pedido todo tipo de disculpas y no sabe ya en donde esconderse. Aunque tengo algunas sugerencias, mi refinada educación me impide expresarlas por escrito.

Schadenfreude se define como la alegría que se deriva de la mala fortuna de otros, y en este caso me declaro culpable y con todos los agravantes.

Postdata II Los Sonidos de Vacuus Finium

La recomendación de hoy es la grabación de 1975, "SOS", del trío de saxofonistas británicos Alan Skidmore, Mike Osborne y John Surman. Estos músicos son pioneros y protagonistas de la escena del jazz libre inglesa surgida en la década de los años sesenta y la recomendación de hoy es una muestra sublime de sus avances, y todas las piezas incluidas son para trío de saxofones.

Es una grabación totalmente envolvente, que evita algunas de las trampas del jazz libre, como pueden ser perderse en la cacofonía o el atropellamiento entre ejecutantes. En este caso, la interacción entre los músicos es notable y crea una atmósfera envolvente desde los primeros acordes, y un discreto uso de sintetizadores y percusión, le agrega color a la música. 

Lamentablemente esta grabación no se encuentra disponible en ningún formato digital y aún en medios físicos solo está disponible en una edición japonesa, que es la que tengo yo, que se consigue a precio de estraperlo. Sería interesante ver si está disponible en los acervos de algún servicio de streaming. No deja de sorprenderme la gran cantidad de música "perdida" que hay en este mundo.


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