Vacuus Finium: 2012: Microsoft y el momento de activar el Plan B

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Termina 2012 y va a ser el año que Microsoft va a preferir olvidar, y tal vez en retrospectiva sea el peor año de su existencia y estén viviendo una situación peor que la crisis de Windows Vista en el invierno de 2007. Para recordar, Windows Vista fue el primer gran fracaso de Microsoft, sus clientes le suplicaron ayuda para evitar usar su nuevo producto. La triste situación de Microsoft, es que hoy en día realmente a nadie le interesa lo que hagan.

Microsoft había planeado introducir la nueva versión de su sistema operativo Windows 8, que le permitiría a la compañía recuperar el liderazgo en el mercado de cómputo personal. Windows 8 debía llevar el dominio de su creador de los ambientes de escritorio a los ambientes móviles. Windows 8 está diseñado para funcionar en ambientes fijos, tablets y teléfonos inteligentes. De alguna forma el gigante tecnológico estaba dando un manotazo en la mesa, para atraer la atención a los consumidores. Este grupo veleidoso había abandonado al gigante poco gentil, para gastar su dinero en productos Apple y productos Android. De acuerdo a Microsoft, había llegado el momento de que el mundo regresara al paraíso.

De acuerdo a los reportes son días negros en las oficinas de Redmond, ya que la realidad que se está viviendo está completamente alejada del guión. Hace doce meses se imaginaban que en diciembre de 2012 estarían brindando por el éxito de Windows 8, la tablet Surface con Windows sería el producto más demandado por los consumidores como regalo de Navidad, y que los teléfonos inteligentes con Windows tendrían largas listas de espera a nivel global.

Los reportes hoy son tristes:

La aceptación de Windows 8 es mala, de hecho la demanda está por debajo del peor escenario.
Microsoft decidió extender sus actividades como fabricante de hardware y presentó al mercado su tablet Surface. Las cifras de venta son uno de los secretos mejor guardados en Microsoft, y no es por modestia. De manera metódica, los voceros de Microsoft se rehusan a presentar cifras exactas de venta de este producto. ¿Por qué será?
Las cifras de ventas de los teléfonos inteligentes con plataforma Windows, son para efectos prácticos inexistentes. Su anuncio fue eclipsado por el desastre del huracán Sandy.
A principio de año, Microsoft hablaba de una estrategia para controlar las "tres pantallas" en la vida de los consumidores: computadora, teléfono y televisión. En diciembre de 2012 solo son competitivos en una de tres pantallas, y el discurso de las tres pantallas no se ha escuchado desde hace meses.
Las malas cifras de venta de las tablets Surface están obligando a Microsoft a ampliar el canal de distribución. Originalmente las Surface se planearon como un producto conceptual con distribución restringida, que se utilizaría para mostrar el potencial de Windows 8. Bajo este plan los diferentes fabricantes asociados a Microsoft, presentarían al mercado docenas de opciones que seducirían a los consumidores.
Esta semana Microsoft anunció que las Surface van a estar disponibles en Estados Unidos en los pisos de ventas de los principales canales al detalle como las cadenas Best Buy y Staples. Este anuncio es una virtual declaración de guerra hacia sus principales asociados. Es difícil predecir la reacción de estos, pero es de suponer que no están muy contentos.
La relación entre los fabricantes de computadoras personales y Microsoft va a entrar en conflicto. Los primeros se sienten ofendidos por la invasión de su terreno, al tiempo que el último considera que estos solo fabrican productos mediocres que aburren al consumidor.
El piso de venta en ambas cadenas es finito y la ganancia en espacio de Microsoft se produce a expensas de alguien más. Y en lo personal no creo que la víctima sea Apple, todo indica que un actual asociado de Microsoft va a salir dañado.
Un artículo de la edición dominical del NY Times muestra que Microsoft ha decidido competir en el terreno de las relaciones públicas y ha contratado a un antiguo operador político de William Clinton para realizar calculados ataques a la imagen de sus competidores, especialmente Google. Durante todo este año he comentados sobre los ataques publicitarios de Microsoft, especialmente contra Google. Clara señal de impotencia.
Todo esto ha estado aderezado por un episodio de intriga palaciega, que ha terminado con la salida de Stephen Sinofsky, responsable del desarrollo de Windows 8. Como platiqué, Sinofsky fue el responsable del lanzamiento de Windows 7 y era el favorito para sustituir a Stevie B(allmer) como CEO de Microsoft. Las razones detrás de esta salida no son públicas, pero todo indica que Stevie B dio un manotazo en la mesa, para conservar su trabajo.

¿Qué hubo de bueno para Microsoft en 2012? Realmente la lista es escueta:

La mejor noticia es el liderazgo en participación de mercado de la consola de juegos XBOX, que le permite reclamar la importante "tercera pantalla"del consumidor: la sala de televisión.
En realidad la base instalada sigue siendo gigantesca y es una fuente de ingresos continuos para la compañía.
La unidad de negocio de Microsoft, dedicada a desarrollar productos para los centros de datos corporativos, ha ido creciendo en rentabilidad y en participación de mercado.

¿Qué hubo de malo para Microsoft en 2012? En realidad la lista es tan larga que quisieran borrar este año de la historia:

Windows Phone es de forma oficial un fracaso absoluto.
El mercado ha simplemente ignorado a Windows 8, tanto los consumidores como los clientes corporativos. Muy lejanos están los días en que una nueva versión de Windows impulsaba grandes proyectos de actualización.
La tablet Surface no ha tenido impacto en el mercado, y la principal amenaza para iPad proviene del universo Android. Todo indica que Surface va a ocupar un lugar junto a Zune en la historia de Microsoft.
La unidad de negocios en línea de Microsoft sigue perdiendo dinero y en realidad es un pozo sin fondo, en especial el motor de búsqueda Bing.
En 2012 Microsoft reportó la primera pérdida de su historia, al reconocer una mala inversión en una compañía de publicidad en línea. ¿Cuál es el monto de la pérdida? simplemente seis billones de dólares.
El episodio de intriga palaciega que concluye con la salida de Stephen Sinofsky ha dejado a Microsoft sin un sucesor claro para Steve Ballmer, quien dicho sea de paso no se está haciendo más joven cada día.

¿Qué sigue para Microsoft? En realidad, no existe un Plan B y solo les queda mantener la ejecución de su estrategia. Un golpe de timón a estas alturas pudiera ser desastroso:

En algún momento, la gran base instalada de Microsoft debe empezar a utilizar Windows 8 y esto debe traducirse en un flujo continuo de ingresos para la compañía. Lamentablemente para ellos esto no es seguro, por más que en su mundo de caramelo el hablantín Michael Dell vea que está próximo el ciclo de renovación de computadoras personales. La euforia que se vivió en 1995 y 1998 no se volverá a ver y eso se los garantizo.
Aunque hasta el momento las tablets Surface son un sonoro fracaso, Microsoft no tiene más opción que reforzarlas en el mercado. El aumento de canales de distribución es solo el primer paso y muy probablemente haya una reducción de precios en primavera. Aquí en realidad tienen el tiempo en contra, ya que su problema no solo es iPad. Las tablets Android van ganando participación de mercado de forma continua.
Rezar para que su golpeteo público se traduzca en una investigación antimonopolio en contra de Google. En su tiempo una investigación similar redujo la capacidad de innovación de Microsoft, y esperan que ahora los ayude a alcanzar a su rival. Sin ayuda externa no hay manera que alcancen a Google y la gran pregunta es cuánto tiempo van a soportar los inversionistas de Microsoft las pérdidas en la unidad de negocios en línea. Hoy en día son al tenor de un billón de dólares por año.
Un artículo de la semana, sugiere que tal vez Microsoft tenga que abandonar la marca Windows para volver a captar la atención de los consumidores. Idea provocadora, sin duda, pero no estoy tan seguro que sea el momento de utilizar el último recurso. Esto si es un plan B.
Microsoft realizó inversiones cercanas al billón de dólares para apoyar a Nokia en la producción de teléfonos Windows. Hasta el momento esta inversión no ha sido productiva, pero no pueden retirarse de este mercado. Microsoft va a tener que aumentar y diversificar sus inversiones para apoyar a fabricantes de teléfonos Windows y no se descarta que también se hagan fabricantes. Este es un escenario de pesadilla para los directores: si se retiran de este mercado es un desastre de proporciones apocalípticas para la compañía, pero por otro lado mantener el curso cuesta billones de dólares y no hay garantía de éxito. Me imagino que esto es lo que tiene de mal humor a Stevie B y ocasiona que sea implacable con los hombres pequeños que buscamos una licencia de Windows 7.

Es difícil predecir el futuro de Microsoft, ya que siguen teniendo un apoyo formidable en su base instalada y amplias reservas de efectivo. Sin embargo, en diciembre de 2012 solo recuerdan al fantasma de las Navidades pasadas. ¿En serio nadie pensó en un plan B?

Postada I Reportes sobre la venganza de Stevie B

Termina la semana y me apena reportar que no he conseguido la licencia de Windows 7 que necesito para crear un ambiente virtual para que las aguerridas fuerzas infantiles de Vacuus Finium hagan su tarea en su computadora Mac nueva. Stevie B 1 Vacuus Finium 0.

Solo me queda decir que esto no acaba hasta que se acaba.

Postdata II Los sonidos de Vacuus Finium

La recomendación para el fin de semana es el disco de 1995 "Silver Rain" del bajista Marcus Miller, uno de los grandes innovadores del contrabajo eléctrico. Miller es un talentoso compositor, arreglista y multi instrumentista que se dio a conocer al lado del legendario Miles Davis en 1979.

Miller es uno de las grandes innovadores del bajo eléctrico y sus discos son una muy correcta colección de composiciones propias, temas de rhytm and blues y alguna versión de algún tema de rock, y la propuesta de hoy no es excepción. Realmente es un disco que se puede disfrutar.

Sin embargo cuando se habla de Marcus Miller, siempre queda una sensación de potencial desperdiciado. Es un ejecutante formidable, y un gran productor y compositor, pero siempre deja la sensación de que algo falta. Sus grabaciones son buenas, y tengo todas, pero son predecibles y sin factor sorpresa. No hay que perder la esperanza de que Miller va a producir pronto una gran obra y en realidad cada una de sus grabaciones proporciona una agradable espera, antes del gran momento.

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