De alguna manera se puede decir que la oferta pública inicial de Facebook ha regresado la atención sobre la discusión del valor y cuidado que se debe tener con la información personal de los individuos que utilizan las diferentes plataformas de Internet. El otro gran dilema, es ¿cuánto vale la información de un individuo?

Otra gran pregunta es, ¿por qué como el dueño de mi información personal, no puedo obtener un beneficio económico directo de la misma? La respuesta de Facebook de que obtengo muchas promociones maravillosas me parece muy pobre y pone a prueba los límites de mi decencia. Afortunadamente el sistema de libre empresa funciona a veces y ya hay al menos un par de empresas buscando crear soluciones que ayuden a los individuos a obtener valor de su información personal, llegando incluso a pensar en que se puede convertir en algún tipo de divisa en línea. En realidad la idea todavía está madurando y falta mucho, pero me parece que es la evolución natural de las plataformas en línea. 

No me termina de gustar la idea que Mark Zuckerberg reciba 120 dólares por mi potencial participación en Facebook y que lo único que yo probablemente recibiría es saber de gente que dejé de ver hace muchos años y que en realidad está bien en ese estado de alejamiento. O pensando de forma más práctica revelando datos importantes de mi persona puedo tener un contacto más directo con proveedores de servicios y recibir un beneficio inmediato. Veamos un ejemplo:

Aunque es lógico pensar que este modelo lo odian las grandes empresas de Internet, ya que hoy en día están recibiendo gigabytes de información personalizada sin costo, los más estratégicos ya están pensando de otra forma. Google, verdaderamente admiro a sus estrategas, anunció un plan piloto para pagar a los usuarios por permitir seguir sus actividades en línea, a través de una extensión del navegador Chrome. El concepto apenas es una idea en incubación, pero definitivamente puede llegar un momento no tan lejano en el que la recolección de información privada de los usuarios deje de ser sin costo para entidades como Facebook o Google.  Aquellos que están pensando en invertir en Facebook, sean advertidos una vez más.

Postdata I  Detalles del perfilado de usuarios

Un amable lector compartió detalles de como funciona el perfilado de individuos a través de sus actividades en el mundo físico. Comentaba sobre la posibilidad de predecir el divorcio de una pareja analizando sus gastos en tarjeta de crédito. De acuerdo a lo compartido hoy con los lectores de Vacuus Finium, el algortimo es aparentemente simple pero muy poderoso: si en un espacio de tres meses en una pareja él compra un automóvil deportivo y ella adquiere algún tipo de intervención plástica ( me imagino que ciertas partes del cuerpo correlacionan mejor que otras), hay que prender las señales de alarma. El banco emisor de las tarjetas aprovecha para disminuir ambas líneas de crédito, ya que es muy probable que al menos uno de los dos se va declarar en bancarrota. 

Aunque este ejemplo suena simple, la tecnología que hay detrás es poderosa y compleja, pero todavía algo primitiva para analizar grandes volúmenes de datos, de cientos de millones de usuarios a través de diferentes vistas. La edición dominical del NY Times toca este tema y bueno una de las conclusiones es que uno de los trabajos de mayor demanda en el futuro va a ser el de matemático, ya que sin duda hay mucho trabajo por hacer.

Postdata II Temas en el tintero

Hoy fue un día de muchas noticias importantes, que merecen análisis más detallado, pero que quiero dejar al menos mencionar. La primera es que Apple rompe el silencio sobre la situación de sus proveedores en China y anuncia un auditoría independiente de Foxconn, esperemos sea para bien de los trabajadores chinos.

La otra también es notable, ya que una nota del NY Times de hoy coincide con lo que comenté acerca de la importancia de crear plataformas completas para competir en Internet. Lo curioso de la nota es que una vez llegamos a la conclusión que el contenido es el verdadero rey y ahí regresamos a la discusión de la posición del complejo industrial de entretenimiento, por lo que nos movemos en círculos.